3 maneras de gestionar el agua con transparencia y eficiencia

Posted on

00427_0003

El agua es uno de los cuatro elementos de la naturaleza, y su acceso universal se considera indispensable para el desarrollo óptimo de una sociedad. A pesar de los enormes avances de nuestra región de las últimas décadas, 77% los latinoamericanos aún no cuentan con acceso a saneamiento seguro, y menos del 25% de las aguas residuales recolectadas son adecuadamente tratadas antes de ser nuevamente vertidas. Cerrar esta brecha requiere una inversión enorme: se estima que durante los próximos 30 años los países de la región tendrían que incrementar sus inversiones en infraestructuras del 3.5% actual al 5% del PIB regional. Sin embargo, tan importante como asegurar el aumento de recursos va a ser garantizar que el dinero se utilice de forma eficiente y transparente.

¿Cómo hacer que la gestión del agua sea transparente?

Desde hace tiempo existe evidencia de que las empresas proveedoras de agua y saneamiento más transparentes también son las más eficientes. Recientemente, desde el BID se a tratado de identificar algunos buenos ejemplos de gestión transparente en el sector:

  1. Independencia de las empresas proveedoras de servicios de agua. En una empresa liderada por prioridades técnicas existen mayores incentivos para optimizar el uso de los recursos. La Empresa Pública de Medellín, por ejemplo, cuenta con un Convenio Marco de Relaciones con el Municipio para reducir las posibles influencias políticas en la gestión y mitigar el riesgo de inestabilidad durante los cambios periódicos en el equipo de gobierno de la alcaldía. Cada alcalde entrante firma de nuevo el convenio, lo que le compromete a hacer públicas las decisiones de la Junta Directiva, a no involucrar ningún interés partidista en la gestión, a no participar ni influir en el proceso de selección de empleados, a garantizar un proceso de evaluación periódica por parte de la Junta, y a no interferir en el manejo financiero de la empresa. La autonomía de la EPM también se extiende a otro aspecto clave: su capacidad de determinar las tarifas siguiendo la normativa vigente.
  2. Participación de la sociedad civil en el monitoreo, e inclusive en la gestión, de las empresas de agua. En Honduras, las instituciones del sector de agua acordaron la creación de las Comisiones Municipales de Agua y Saneamiento (COMAS) y de las Unidades de Supervisión y Control Local (USCL). Ambas son instancias ciudadanas de supervisión y control encargadas de velar por la correcta aplicación de los reglamentos. Las COMAS y USCL también atienden solicitudes y quejas sobre la prestación del servicio. Servicio Aguas de Comayagua (SAC) es una de las empresas que ha dado seguimiento a la ley hondureña y ha creado ambas instancias de control ciudadano. En la SAC, la junta directiva de la empresa incluye tres ciudadanos miembros de la COMAS – la mitad del total. La junta directiva, entre sus múltiples atribuciones, nombra al gerente y a los jefes de departamentos técnicos y administrativos, establece las directrices de la prestación de servicios, aprueba el plan de inversiones y hace recomendaciones a la corporación municipal sobre tarifas y proyectos de ampliación..
  3. Adopción de estándares internacionales. La aplicación de normativas globales se ha convertido en un poderoso incentivo para mejorar la eficiencia y la transparencia de las empresas de agua. Un ejemplo es el caso de la Empresa Pública de Quito (EPMAPS) con AquaRating. AquaRating, desarrollado por el BID y la International Water Association, es un sistema de evaluación de desempeño de empresas prestadoras de servicio de agua y saneamiento que evalúa, entre otras áreas, la calidad del servicio, la eficiencia en la operación y en la ejecución de inversiones, la eficiencia en la gestión empresarial, y la solidez del gobierno corporativo. A finales del 2012, la EPMAPS participó como una de primeras entidades prestadoras en someterse a la prueba piloto del sistema. A esto, le siguió una auditoría piloto a finales del 2013 y un período de calificación en el año 2014, lo que le permitió recibir, en el 2016, la certificación AquaRating.

América Latina goza de un tercio de las reservas de agua dulce del mundo y una disponibilidad per cápita tres veces superior al promedio mundial. La transparencia en la gestión del agua es un proceso que requiere visión estratégica, y es requisito indispensable para conseguir un entorno de confianza y una mejora contante en la eficiencia de la gestión de los recursos hídricos.

Transparencia: Impulsando eficiencia en empresas proveedoras de servicios de agua y saneamiento: Buenas prácticas en cuatro empresas de América Latina.

La adopción de prácticas de transparencia es uno de los determinantes principales de la eficiencia de los proveedores y reguladores de servicios de agua y saneamiento (AyS). Esta es una de las lecciones más relevantes de las reformas implementadas en el sector de agua y saneamiento en América Latina y el Caribe en los últimos 20 años. La transparencia, considerada tradicionalmente como un deber ético para las empresas proveedoras del sector, recientemente ha empezado a ser reconocida como una herramienta para accionar la rendición de cuentas, reducir los riesgos de corrupción y aumentar la confianza en los prestadores y reguladores. Esto en parte ha sido posible porque la implementación de procesos e iniciativas de gobierno corporativo, incluyendo los mecanismos de transparencia, han permitido orientar el funcionamiento de las entidades proveedoras de AyS para alcanzar objetivos concretos y medibles, tanto interna como externamente. Con ello, se promueve al mismo tiempo la integridad de los procesos de adquisiciones, contratación e inversión, lo que a su vez contribuye a aumentar la confianza de los usuarios, calificadores de riesgos, proveedores de financiamiento, inversionistas y autoridades en las empresas proveedoras. De la misma manera, esto promueve una mayor participación ciudadana en el control de los servicios, además de un mejor acceso a fuentes de financiamiento. Como resultado, hay mayores y mejores inversiones, lo que se traduce en avances en la calidad y en un mayor acceso a los servicios de AyS.

 

 

Descargar documento PDF 

 

 

FUENTE: gobernarte – BID

Deja un comentario